Miel de roble pura 30 gr
ORIGEN: España y otras áreas de la Península Ibérica
ESPECIE REPRESENTATIVA: Roble.
COMPOSICIÓN FLORAL MAYORITARIA: Roble, Variedades de Brezo, Castaño y Flora silvestre autóctona variada.
ÉPOCA DE PRODUCCIÓN: Final de verano.
COLOR: Ámbar oscuro muy intenso.
SABOR: Dulce sabor rotundo, penetrante y malteado.
AROMA: Nítidamente intenso y persistente con tiznes malteados.
PECULIARIDADES: Miel cruda, pura, no homogeneizada, no filtrada, sin azúcares añadidos.
CONSERVACIÓN: Mantener en lugar seco, semioscuro y fresco, para mantener intactas de un modo natural todas sus cualidades..
**En su proceso natural, la miel cristaliza y endurece en función de diversos parámetros (temperatura, origen floral, etc..).
CARACTERÍSTICAS DE LA MIEL DE ROBLE
La miel natural de roble posee color ámbar oscuro muy intenso y dulce sabor rotundo, penetrante, malteado, que evoca una fascinante sensación amaderada de ancestrales orígenes. Su aroma es nítidamente intenso y persistente con tiznes malteados, acopiando sensaciones mentoladas ligeramente aromatizadas. Cristaliza escasamente dando lugar a una miel profundamente densa.
La cosechan las abejas durante el final del verano, dando lugar a una singular composición basada fundamentalmente en ricos mielatos, procedentes de secreciones resinosas que exuda el roble (Quercus robur) como especie vegetal más representativa; en menor medida, el polen y néctar de las flores de brezos (Erica sp), castaños (Castanea sativa) y especies de porte bajo, aderezan esta exquisita y dulce mezcolanza montañesa de intenso color oscuro.
EXCELENCIAS DE LA MIEL DE ROBLE
Al igual que el resto de nuestros productos de la colmena (mieles y derivados (polen, propóleos, jalea real..)), hablamos de una miel natural tradicional de roble recolectada por nuestras abejas en zonas boscosas silvestres, que posee excelsas cualidades:
Cruda: no ha sido sometida a procesos de sobrecalentamiento (más de 40 º) ni pasteurización, por lo cual preserva inmaculadas todas las vitaminas, nutrientes y enzimas, así como sus cualidades organolépticas.
Exenta de procesos de filtrado: así conservamos todas las cualidades naturales de las especies vegetales de origen, obteniendo así un producto natural de primera calidad.
Pura: la producen las abejas libando polen y néctar flores silvestres y secreciones de plantas e insectos chupadores, para proceder después a su transformación y almacenamiento en los panales del interior de la colmena; es por tanto, una miel 100% pura, que mantiene su grado de esencia natural en todo momento.
Sin azúcares añadidos: contiene azúcares naturales propios de una miel natural no adulterada, manteniéndose tal y como la abeja la produce en la colmena.
No homogeneizada: para que una miel mantenga todos sus atributos, excluimos en nuestro proceso el mezclado de mieles naturales de diferentes procedencias geográficas o florales, porque nuestro objetivo permanente es mantener la esencia y pureza desde su origen hasta el paladar del consumidor final.
CONSEJOS DE USO
Las mieles naturales de roble recolectadas por nuestras abejas poseen cualidades únicas, de tal modo que es aconsejable tomarlas directamente, saboreándolas dentro de la boca el mayor tiempo posible antes de ingerirlas.
Para hacerlas más manejables en aquellos casos que se prefieran diluidas, se recomienda como mucho, calentar al “Baño María” a temperatura que no supere nunca los 40 º para evitar la pérdida de atributos.